viernes, 10 de octubre de 2014

La Batalla de Tanga. Las Abejas Que Lucharon con el Kaiser.






África Oriental Alemana fue una colonia de Alemania en el África Oriental, con una extensión de 994.996 km², que incluía lo que en la actualidad es Burundi, Ruanda y la parte continental de Tanzania. Comenzó a existir en la década de 1880 y desapareció tras la Primera Guerra Mundial, cuando la zona fue adjudicada al Reino Unido en el Tratado de Versalles (1919).

En este marco se desarrolló La batalla de Tanga, que fue el mayor enfrentamiento de la Primera Guerra Mundial que se desarrolló en suelo africano, entre los ejércitos coloniales de Gran Bretaña y Alemania.
El objetivo de los británicos era la ocupación del África Oriental Alemana y así el 5 de noviembre de 1914 el ejercito colonial Británico con 8.000 soldados reservistas indios se enfrentó a un millar de Askaris africanos (tropas indígenas que sirvieron en los ejércitos coloniales europeos durante los siglos XIX y XX) que luchaban bajo bandera alemana.
La buena disposición táctica del Comandante Paul Emil von Lettow-Vorbeck hizo que el ejercito germano derrotase al dirigido por el General Británico Arthur Aitken en una batalla encarnizada gracias a unos inesperados aliados.
Batalla
General Paul Emil von Lettow-Vorbeck
Los británicos tomaron la decisión de atacar la ciudad de Tanga para iniciar la conquista de la colonia alemana mediante un ataque anfibio. La ciudad de Tanga estaba a sólo 80 km de la frontera con el África Oriental Británica y era el puerto alemán más importante de la zona y un importante nudo ferroviario. El ataque británico consistía en bombardear el puerto desde barcos situados mar adentro, pero tras firmarse un acuerdo de no agresión a la población, se desestimo.
gran bretañaVarios días después arribó a la zona el HMS Fox, que anunció la ruptura del acuerdo de no agresión. Las tropas que se encontraban en la ciudad, que al principio eran una sola compañía de askaris, se prepararon para el combate. El General Paul von Lettow-Vorbeck, movilizó algo más de 1.000 soldados desde las regiones circundantes a la ciudad, para unirse a los askaris de la ciudad, llegando hasta los 1.100 efectivos.



El general británico Arthur Aitken pensaba que los alemanes habían minado la zona que rodeaba al puerto y decidió que la flota se dirigiera 3 millas hacia el sur y desembarcase allí los 8.000 soldados indios para dirigirse desde allí hacia el norte y tomar la ciudad. Al día siguiente Aitken las tropas británicas tuvieron que marchar sin enviar exploradores y cayeron en una emboscada de la guarnición de Tanga. Al caer la tarde, tras varias horas de lucha en la selva, los soldados británicos que se encontraban en una zona de marismas comenzaron a ser atacados por enjambres de abejas salvajes, que tenían sus panales en los troncos huecos de los arboles. Pero las abejas no formaban parte del plan de guerra ni estaban “hábilmente adiestradas”, tal y como aseguró el diario inglés “The Times”.

I Guerra Mundial


Pese a estar en clara desventaja numérica (superado por 8 a 1), Paul von Lettow-Vorbeck aprovecho hábilmente el ataque de sus "aliadas la abejas" y ordenó un contraataque, obligando a las tropas indias a volver a los botes de desembarco. Esta victoria fue la primera que Paul von Lettow-Vorbeck consiguió en la Primera Guerra Mundial y fue recibido en Alemania como un héroe; pero a las abejas no las condecoraron. Debía ser muy difícil ponerles una cruz de hierro.








Cadáveres de soldados indúes después de la batalla.









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