"Su estatura era un poco superior a la media entre las mujeres. Empezaré por describirla. Era delgada y maravillosamente grácil. Sólo que sus movimientos eran lánguidos....... Muy lánguidos...."
De esta manera describe Joseph Sheridan Le Fanu (1814-1873) una de las vampiresas más atractivas de la literatura gótica. Este genial autor irlandes fue el precursor del género del horror en su forma moderna. En sus historias no siempre triunfa la virtud y no hay una explicación lógica y sencilla de los fenómenos sobrenaturales, por lo que está considerado el padre del cuento de fantasmas irlandés de la época victoriana. Fué en 1872 y bajo el título de " In a glass Darkly" (En un vaso oscuro) cuando nos deleitó con tres inquietantes relatos. En dos de ellos: "Te verde" y "El conocido", nos sumerge en un mundo enigmático, donde los sucesos aparecen convocados por una culpa oscura. Con el tercero, "Carmilla", afianzará muchas de las características del terror gótico y de la figura del vampiro.
La trama trascurre en un lejano castillo de Estiria( Austria ) .Allí vive una hermosa joven llamada Laura, su padre y una pequeña corte de sirvientes.
Su vida da un giro inesperado cuando un carruaje sufre un accidente cerca del lugar y sus ocupantes son acogidos como huéspedes, una noble dama y su hija Carmilla. Esta última entablará amistad con Laura, de la que parece estar enamorada.
Carmilla o Millarca es una sensual vampiresa que fijará el estereotipo de los hijos de la noche. Ella es la última de una dinastía maldita, pertenece a la alta nobleza, domina a un animal con fama de inquietante (el gato), no sale de día y su aspecto marcara pautas: labios rojos y sensuales, piel blanca y ojos felinos. Su oponente Vordenborg Barou será el precursor de la figura de cazador de vampiros y que posteriormente será repetida hasta la saciedad. El autor ve la sexualidad del vampiro desde otra óptica. La bisexualidad; tema tabú en la época, parte como eje central de su obra. Carmilla es lesbiana y evita la retrógrada censura victoriana al encuadrar su historia dentro del género macabro.
La estructura básica de la novela de vampiros quedará también definida por Carmilla, quien ataca a sus víctimas generando una sensación de terror y éxtasis mientras los personajes afectados por este fenómeno unen fuerzas cuando descubren cual es la raíz del mal.
Por todo ello, no resulta gratuito afirmar que Joseph Sheridan Le Fanu es uno de los grandes. Un autor que sobre todo a partir de Carmilla, impregnó el género con unas delicadas gotas de romanticismo que hoy todavía caracteriza este tipo de literatura.
The Vampire lovers (1970)
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